Milagrosa Victoria de Atlanta

Aficionados y fanáticos de la pelota caliente, el segundo partido de la serie divisional jugado anoche en el AT&T Park entre los Giants y los Braves fue uno de esos juegos que me hizo recordar lo altamente identificado que me encuentro con el lema de la Major League Baseball : I LIVE FOR THIS

Y es que  este partido en el cual los Braves se impusieron de manera casi que milagrosa con pizarra final de 5 carreras a 4 fue uno que tuvo todos los elementos típicos  de un partido de postemporada: Drama, jugadas defensivas de lujo, lesiones y por supuesto una alta dosis de adrenalina y momentos de infarto  en las últimas entradas del encuentro.

Las cosas arrancaron muy mal para los dirigidos por Bobby Cox ya que en la misma primera entrada  un cuadrangular de 3 carreras  conectado por Pat Burrell ante los envíos de Tommy Hanson , parecía poner las cosas fuera de su alcance, teniendo en cuenta lo mal que lucio su ofensiva en el primer partido  y  al hecho de que enfrentaban  a un lanzador de gran calidad como lo es Matt Cain.

Los Braves estuvieron la sorprendente cantidad de 14 entradas sin anotar una carrera  hasta que su receptor estrella Brian McCan conecto un sencillo en la sexta entrada que trajo al plato a Derrek Lee para finalmente quitar el cero en su pizarra. Luego en el octavo inning los de Atlanta lograron empatar el juego con un doble impulsador de 2 carreras de el veterano Alex Gonzales ante los envíos del cerrador estrella Brian Wilson  quien dicho sea de paso,  en una decisión bastante cuestionable el manager Bruce Bochy decidió traer desde el octavo Inning  para tratar de conseguir un salvamento de 6 outs siendo esta a mi parecer una movida demasiado precipitada.

Luego de que Wilson  y el sorprendente lanzador de Atlanta Craig Krimbel lograran mantener las cosas empatadas en el 9 Inning, por primera vez en la postemporada 2010 un juego se iba a definir en entradas adicionales. Y fue en la parte baja de la decima entrada donde los Giants desperdiciaron una inmejorable oportunidad de ganar cuando con Bases llenas el novato sensación Buster Posey conecto un roletazo para doublé Play que dejo fríos e incrédulos a los bulliciosos  fanáticos de San Francisco.

Y en la parte alta de la siguiente entrada los Braves dieron el golpe Mortal:

Rick Ankiel conecto un soberbio cuadrangular por el jardín derecho ante el dominicano Ramon Ramírez que desato una autentica locura en el Club House visitante. Sinceramente me alegra mucho por Ankiel quien sin dudas es un autentico ejemplo de superación, perseverancia y amor por este deporte ya que este señor estuvo con un pie fuera del deporte cuando tuvo esos horribles problemas de control en sus tiempos de lanzador en los Cardinals y el retiro parecía su única opción. Pero un Coach en las ligas menores le recomendó que probara suerte como bateador y después de varios años realizando los respectivos ajustes, Ankiel logro ganarse un puesto en las grandes ligas y por  esas cosas maravillosas que tiene la vida, se convirtió en el héroe que con su batazo  puede cambiar la historia de los Braves en esta postemporada.